perdonar no es olvidar
y si de algo me olvidé
fue por mi y nadie más
quizás porque el rencor
me nubla, y amarga
nunca me renovó.
siempre pensé que
debía perdonar todo
lo que con intención
o como protección
me había hecho doler
pero, ¿de qué sirve perdonarlo todo?
hoy ya no soy yo
un cascarón por fuera
esperando romperse